- Francesco Tonucci, Con ojos de niño
- A.S. Neill, Summerhill
- August Aichhorm, Juventud desamparada
- George Orwell, Rebelión en la granja
Pequeños olvidados
Para todos aquellos que experimentan día a día el estar en contacto con los pequeños olvidados. Lo que nos hacen vivir, sentir, reír, sufrir... Este blog se crea para los que quieran contar sus vivencias ya que todas ellas, seguro, son tan intensas como la mía. Os echo de menos, pequeños. Nunca os olvidaré.
jueves, 22 de diciembre de 2011
Libros que recomiendo leer a los que educamos
miércoles, 21 de diciembre de 2011
Certamen Fotográfico
HAY LÍNEAS QUE ES MEJOR NO CRUZAR |
Fotografía que se quedó en tercer lugar en el Concurso Fotográfico "Que el consumo no te consuma".
El autor de la foto es uno de nuestros chicos, su nombre es Alex y tenía 16 años.
FAIM, Zaragoza 2010
sábado, 10 de diciembre de 2011
lunes, 5 de diciembre de 2011
PURA SENSIBILIDAD
Aunque os parezca mentira algunos de los chicos del centro nos piden ayuda a la hora de escribir mensajes de amor a las parejas que dejan fuera (algunos tienen varias, otros dicen hacerse novios por las redes sociales...) pero como experiencia os cuento que siempre les remito a Pablo Neruda y al poema de Puedo escribir los versos más tristes esta noche... Las reacciones son increíbles, algunos empezaban a pedirme que les recomendase lecturas y empezaban a leer, incluso, he visto llorar a chicos que se hacían pasar por "tipos duros" y es que, los clásicos siempre funcionan.
Aprovecho la ocasión para colgar el poema porque no tiene desperdicio
Aprovecho la ocasión para colgar el poema porque no tiene desperdicio
sábado, 3 de diciembre de 2011
jueves, 17 de noviembre de 2011
martes, 1 de noviembre de 2011
A mis grandes compañeros
Me acuerdo cuando empecé a trabajar en este sitio. Cuando llegas no sabes muy bien dónde estas pero vas con mil ojos. Te dicen que andes con cuidado, que no les des la espalda, que no te fíes, que son mentirosos expertos, en fin... Precisamente, los que dicen esto es que no han trabajado en el centro (CEIMJ). Con los años aprendes mil millones de cosas. Te das cuenta que los chicos que entran con una medida judicial sufren diversas situaciones en las que no sabemos cómo hubiésemos actuado nosotros si estuviésemos en su piel. Nosotros, los que nos llamamos educadores (que ahora casi ni nos dejan llamarnos así, irónico, eh?) sabemos lo que significa que te encierren y que te separen del exterior, un lugar que dista bastante de la noción que tiene una persona de a pie cualquiera.
Todos mis compañeros experimentan el significado de dar sin esperar nada a cambio. Aunque esto nos es del todo cierto porque este tipo de chicos te hacen sentir cosas que son inexplicables, tienes que vivirlas. Ves un cambio en ellos, cómo se abren y te cuentan cosas inconfesables, cómo aprenden a quererte y cómo aprendes a quererlos. Es muy difícil expresar en unas palabras todo este cúmulo de sentimientos, para entenderlo hay que vivirlo, por eso necesito nombrar a las personas que han vivido estos momentos conmigo y que son capaces de entenderlo. Me permito el lujo de escribir éstas líneas que van dedicadas a mis queridos compañeros como Carlos, Pako, Adol, Eva, Inma, Alicica, Rosi, Vero, Javi, Parrita, Susana, Pedro, Pilar, Baldesca... y muchos más, porque es una gran lista. Grandísimos profesionales que sin ellos me hubiese perdido muchas cosas importantes de mi vida. Ah!!! se me olvidaba, ninguno de ellos tiene la carrera de educación social y son los mejores educadores que conozco y no es que lo diga yo solo, les podeis preguntar a cualquiera de los chicos que han pasado por allí que cuando nos ven por la calle se nos comen a besos y nosotros a ellos.
¿De verdad creéis que a los chicos que ingresan les importa lo que hayamos estudiado o es más importante educarles y darles cariño?
Todos mis compañeros experimentan el significado de dar sin esperar nada a cambio. Aunque esto nos es del todo cierto porque este tipo de chicos te hacen sentir cosas que son inexplicables, tienes que vivirlas. Ves un cambio en ellos, cómo se abren y te cuentan cosas inconfesables, cómo aprenden a quererte y cómo aprendes a quererlos. Es muy difícil expresar en unas palabras todo este cúmulo de sentimientos, para entenderlo hay que vivirlo, por eso necesito nombrar a las personas que han vivido estos momentos conmigo y que son capaces de entenderlo. Me permito el lujo de escribir éstas líneas que van dedicadas a mis queridos compañeros como Carlos, Pako, Adol, Eva, Inma, Alicica, Rosi, Vero, Javi, Parrita, Susana, Pedro, Pilar, Baldesca... y muchos más, porque es una gran lista. Grandísimos profesionales que sin ellos me hubiese perdido muchas cosas importantes de mi vida. Ah!!! se me olvidaba, ninguno de ellos tiene la carrera de educación social y son los mejores educadores que conozco y no es que lo diga yo solo, les podeis preguntar a cualquiera de los chicos que han pasado por allí que cuando nos ven por la calle se nos comen a besos y nosotros a ellos.
¿De verdad creéis que a los chicos que ingresan les importa lo que hayamos estudiado o es más importante educarles y darles cariño?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)